Tus ojos, tu respiración, tu boca, tus manos, tus sentidos, tu olor, tu respiración, tu cabello, tu nariz... tu sonrisa.
Había sido un encuentro mejor de lo que esperaba.
Era la décima vez que intentaba verte pero entre mis viajes a París, mis constantes visitas a Turquía y tu exitosa carrera como ingeniera en la cual, también viajabas mucho.
Era imposible verte.
Por fin habíamos pactado una cita.
12:00 am
Sábado, 20 de junio, 2010.
Conocido Restaurante Italiano de Av. Universidad y Eje 8 sur.
Yo estaría llegando de Madrid a las nueve de la mañana entonces tenía el tiempo perfecto para instalarme, arreglarme e ir a verte.
Tú vendrías de Cancún, de finiquitar un proyecto en el que invertiste mucho de tu tiempo.
ANHELABA tanto, tanto el volver a reencontrarnos. Teníamos más de dos años de no verte y solamente platicabamos por skipe o facebook.
Pero no era lo mismo.
Teníamos tantas cosas que aclarar.
La última vez que pase por aquella avenida, hice justamente lo mismo que en aquel entonces.
Me detuve al ver una señora que vendía artesanías mexicanas. Te encanta la filigrana.
Compré un par de aretes, dos anillos, y unos juguetes que recuerdo te molestaste por que la primera vez no dejé que tu gastaras ni un peso.
Y todo paso a mi poder con una sonriente Sor Juana Ines que cayó en las manos de aquella señora como si se hubiera sacado la lotería.
Llegué puntual a la cita.
A dos metros de la recepción había un espejo.
En el alcance a percatarme del hombre en el que me había convertido.
Músico, exitoso, reconocido, con trayectoria, aún con ANHELOS...
Los años también hacían estragos en mi cara, en mi rostro; del poco cabello que aun crecía de las sienes, todo era una brizna de nieve.
Aún así me preocupaba por verme bien... Aún esos ojos claros que tanta suerte me habían traído los conservaba perfectamente.
Me sentía a gusto, bien conmigo mismo, pero de esos ANHELOS de los cuales aun tenía, era de realizarme
personalmente.
Ya conocía el mundo, del triunfo, de fracasos, de amores y des amores pero, aún necesitaba esa ancla; ese imán que cada que llegara a mi país, pudiera decir : "He llegado a mi hogar, con mi familia".
No había pensado en nadie más, no existía en mi corazón nadie que llenara ese hueco que había dejado.
Nadie a quien dedicarle mis canciones, nadie a quien contarle las grandes aventuras que vivía.
Respire hondo.
A pesar de los años de experiencia en "citas", esta ocasión era diferente.
Era sumamente especial...
Estaba dispuesto a enfrentar ese miedo a que rechazaras lo que siento.
Pero llegaba el momento y el día.
-Está lista su reservación, ¿Sr. Montoy?- Decía la muy amable "hoster"
-Si, soy yo.-
-Dos personas verdad?-
-Así es.-
Justo en ese momento que cruzaba esa puerta de vitromosaico, por la mampara vi pasar un automóvil como en el que te vi la última vez.
-Perdón señorita pero prefiero esperar en la recepción.-
-Si señor, como usted lo decida.-
Claramente vi tu rostro detrás de esos lentes obscuros, con ese cabello "enmarañado" como siempre te lo decía.
Tan bella, hermosa, linda, despampanante... ¡Los años a ti te sentaban muy bien¡
Te veía rozagante, más feliz y realizada que nunca.
Corrí hacía la esquina donde veía una florería. Pedí TODOS los girasoles que tuvieran... Pero de EMERGENCIA ¡¡¡
-Alguien puede vivir o morir si no actúa rápido.- Se lo advertí al florista.
Me atendió lo más rápido que pudo.
Regresé tan veloz como me permitio mi calzado e irónicamente ya estabas ahí.
Llevabas un traje color rojo pegado a tu piel, perfecta combinación entre zapatos y bolso.... Simplemente perfecta.
Me acerque a ti y te susurre al oído.
-¿Comó le hace una mariposa como usted para conservarse tan hermosa con el paso de los años?.-Te dije.
-No lo sé, yo creo que seguro es por la playa, el trabajo ¡que se yo¡..-
Nos fundimos en un abrazo taaan largo y profundo que sentí que pasaríamos así el resto de nuestras vidas...
-¿Comó estás?-Preguntaste.
-Ahora... ¡Perfecto¡-Respondí
-Mira, son para ti-
-¿Girasoles?¡¡ Hace años que me dejaron de gustar ¡¡- Un poco enfadada.
-Lo siento, pensé que...
-¡Jajajajaja¡, es broma.Gracias sabes que siempre me han fascinado.
Definitivamente aún tenías "el control" sobre mi de esas acciones.
Pasamos.
Nos sentamos.
El mesero nos atendió con un exquisito aperitivo.
-Y bien que cuenta Cancún?-
-Y bien que tal París?-Replicaste.
-Bueno mejor brindamos no ?-
-¿Por?-
-Por vernos, por nuestras carreras, por nosotros, por el futuro...
-¿Por el pasado?-
-Sí, también por el pasado.
-Mira, tengo otra sorpresa... pero cierra los ojos y junta tus manos.
Obedeciste al pie de la letra mis indicaciones y puse en tus manos aquella filigrana que le comprara a aquella mujer.
Aún recordaba las palabras de esa señora.
-"A su esposa le encantara, joven"- Y que solo sonreí...
-Anda, abrelos-
...
En efectivo te habían encantado.
-¿Recuerdas la última vez que me regalaste unos?-
-Si, pero recuerdo más el día que los estrenaste...
-Aún no olvidas ese día verdad?-Cuestionabas.
-Ese día marcó nuestro trato, no fue para menos, pero no te preocupes ya lo olvidé, ya lo perdone...
-Quisiera aclararte cosas de ese entonces...
-No hace falta y lo sabes... ya pasó... ahora me interesa más lo que pasa en nuestro presente.
-Pero lo necesito, tengo ese ANHELO de aclararlo contigo. Te fuiste de mi vida y de la vida de muchos, solo con el paso de los años volví a saber de ti, pero no hemos vuelto a mencionarlo, necesito aclararlo, ¡Por favor¡ Es el ANHELO más grande de mi vida...
-Ok, corazón, te escucho...
FIN PRIMERA PARTE
ROBERTO MONTOY
MARZO, 2011
SAN VICENTE CHICOLOAPAN, EDO. DE MEX.
aun no lo termino de subir asi que no lo lean jajaja
ResponderEliminarPara eso existe la opción de "Guardar borrador", entérate... :D
ResponderEliminares que cuando lo subi aun no o terminaba y no aparecia esa opciòn ji ji ji lo siento maestro ¡¡¡¡
ResponderEliminarMi rey... (Ah..., no, bueeeno.) Está justo junto a la de "Publicar", ¿sabes? A menos de si estés muy despistado y no la hayas visto.
ResponderEliminarDe cualquier manera, está monón tu texto...
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